Hay momentos en la vida en los que piensas que lo tienes todo claro, y
de repente, pasa algo que te hace replantearte de nuevo toda tu vida.
Por el motivo que sea, comienzas a preguntarte si las prioridades que
tienes en tu vida están bien establecidas, e incluso inconscientemente
las cambias todas de un día a otro. Te das cuenta de que, aunque
pensabas que vivías al día, dejabas fuera de tu vida cosas importantes,
de que realmente no estabas viviendo si no solamente dejando pasar los
días... y despiertas de golpe, dándole a cada cosa la importancia que
realmente se merece.
No hay comentarios:
Publicar un comentario