Amigos

Estoy teniendo muy poco tiempo para escribir. Tengo mucho trabajo y casi no paro, pero está trayendo sus frutos.
Hoy he recibido un sms de un amigo preocupándose por si me había pasado algo. Me he quedado perpleja porque no sabía a qué se refería pero le he llamado y me ha aclarado que lo decía por el accidente de trenes que ha habido en Valencia. Y es que vivo detrás de la luna... no me entero de nada. Pero por si tenía alguna duda, me ha demostrado que es un buen amigo que se preocupa por mi.
También ha reaparecido alguién con quien hacía tiempo que no hablaba. Otro buen amigo, que vive muy lejos. Un cielo de niño pero por desgracia me ha llegado la visita que esperaba y no hemos podido hablar mucho más. Aún así, me ha alegrado mucho haber podido hablar con él un ratito.
Y ese ángel, ese alma gemela, que siempre vela por mi, siempre se interesa por mi. Qué decir de él... si es que diga lo que diga me quedo corta, nunca tendré palabras para expresar lo que significa para mi.
Todo eso sin contar a más personas con las que también he hablado hoy, todas ellas importantes, cada uno a su forma. Hoy ha sido un día de esos de hablar con quien menos te lo esperas, por teléfono, en el Chat, en el msn... y me ha venido bien darme cuenta que no estoy tan sola como a veces me siento.
Y es que en esas fases en las que uno esta triste, desganado y sin fuerzas de nada nunca viene mal darse cuenta de que alguien que te quiere está pensando en ti. Porque aunque parezca que no, un mínimo gesto de afecto en esos momentos, un simple sms, un correo, o una simple llamada, puede animarnos el día y darnos fuerzas para seguir sin mirar atrás.
Y es que por desgracia, a veces pasamos por alto que quizás quien más fuerte parece y menos parece necesitar esos detallitos, es quién más los necesita en realidad y quien más los agradece.
No olvidemos nunca que si a nosotros nos gusta que estén atentos de nosotros,... ¿Porqué no le va a gustar también a esa persona que está ahí siempre y en cualquier momento para escucharnos y apoyarnos?
Besotes