miércoles, 7 de septiembre de 2005

Allá dónde estés...


Allá dónde estés quiero pensar
que me puedes ver, que me puedes abrazar
aun en pensamientos aunque yo no lo sienta,
que de mí puedas guardar
aun en la distancia de distintas dimensiones.

Allá dónde estés, espérame.
Cuando llegue mi tiempo, contigo iré.
Cuando llegue mi tiempo sabremos
que nunca estuvimos separados
más que por las condiciones
de la vida terrenal...

Entonces estarán juntos nuestros corazones.
Entonces estaremos juntos...
para la eternidad.



Este poema se lo he escrito hoy a una amiga que ha perdido a alguien muy especial para ella. Era una bonita historia de amistad, por no decir de amor.
¿Amor? Si, yo creo que asi se le puede llamar. Dos personas que nunca se han visto, nunca se han tocado... pero sí se han hablado, se han sentido, han reído, han llorado, han disfrutado compartiendo su tiempo. A veces es tan dificil distinguir lo virtual de lo real, claro que la vida está aquí fuera... pero cuando hablas tantas y tantas horas con alguien uno se acaba encariñando, y ese cariño, aunque la "relación" sea virtual, es de lo más real.
No por no haberse visto nunca el dolor es menor por perder a alguien querido, todo lo contrario. Surgen tantas y tantas preguntas... La más importante quizás la de... ¿Qué hubiera sido si...? Pero en el fondo nos queda el consuelo de que realmente nos han dado todo lo que nos podían dar.
Me pregunto para cual de las dos partes es mayor la tristeza de no poder estar juntos, supongo que para ambas de distinta forma aunque no por ello mayor o menor. Cada uno lleva su proceso por dentro y tiene claras sus limitaciones, los dos sabiendo que nunca será más que un sueño.
Sólo queda una pregunta sin respuesta : ¿Qué haré yo si tú algún día dejas de existir? ¿Acaso me enteraré? Quizás me toque consolarme pensando que al final has puesto los pies en el suelo y has vuelto a la realidad, olvidándote de mi...
Aunque eso, nunca me lo acabaré de creer. Porque en el fondo siempre sabré que esa no es la realidad, pues lo que un día tanto se amó nunca se olvida con tanta facilidad.

12 comentarios:

  1. te quiero petarda

    ResponderEliminar
  2. Y yo a ti boba.
    Anda, no llores más... piensa que ahora es tu ángel de la guarda :-)

    ResponderEliminar
  3. Uyyy si te han llamado petarda!!! Yo creía que tenía la exclusiva... Adivina quién soy :D
    Y aprovecho para darle un abrazo cariñoso a quien llamas "boba"

    ResponderEliminar
  4. Pos claro que adivino quién eres jeje eres el petardo mayor al que kero tanto...
    La bobita ya se ha quedado tu abrazo... ¿¿¿y yo qué???

    ResponderEliminar
  5. Para tí... un collejón por ser adivina; y mi cariño *:):)

    ResponderEliminar
  6. Que haras? Sonreir por lo que tuviste y apoyarte en lo que te quede y valga la pena de ese mundo.....(Seamos realistas, muy pocos puntos de apoyo pero muy valiosos)

    ResponderEliminar
  7. Cierto... al menos fue bonito mientras duró... pero no es fácil asumir que alguien que nos quiere de repente ya no está, por el motivo que sea ¿no crees?

    ResponderEliminar
  8. Tampoco es facil asumir que creias que te queria no era lo que sentia por ti. Suerte de que la gente te crea una persona dura y muy fuerte... :)

    ResponderEliminar
  9. Lo peor de todo quizás sea que encima no se enteren de lo que les queremos nosotras.
    Y eso de suerte de que la gente te crea tan fuerte habría que verlo... que nosotras tampoco somos de piedra y necesitamos a alguien en quien apoyarnos. Luego se quejan si te lo buscas en otra parte.

    ResponderEliminar
  10. No, decia suerte porque asi no pareces vulnerable, aunque lo seas, y mucho

    ResponderEliminar
  11. Mirémosle la parte buena... nos quedamos nosotras, las amigas... ejem ¿como taba eso de hacernos lesbianas? xDDDDDD

    ResponderEliminar
  12. uy no, yo sigo repasando los folletos de los conventos, jaja

    ResponderEliminar