domingo, 25 de marzo de 2007

Ha vuelto a suceder



Hace mucho tiempo dejé un post con título Presentimientos.
Hubo mucha gente que se lo tomó como lo que no era, de repente me preguntaban "si veía algo" con ellos. Estas cosas no son como las tarotistas que le clavan a uno una cantidad a cambio de no decirle nada.
Para bien o para mal, simplemente se siente algo, en algún momento, como que algo va a pasar. La mayoría de las veces se junta con un malestar tonto que uno no sabé a qué viene... hasta que ALGO pasa.
Y no es agradable, nada agradable. Ha vuelto a suceder. Ayer estaba que me subía por las paredes, intentando saber porqué estaba así, susceptible, sensible, con un nudo en el estómago.
Sé que hay gente que no cree en estas cosas, y otra, a la que les saca de quicio... yo no creía en ellas, pero son demasiadas "casualidades", demasiadas veces... y no se puede predecir el futuro a petición, simplemente de vez en cuando, de repente una sabe que algo va a suceder... y normalmente no suele ser nada bueno.
Esta mañana, a las 8,55h (9,55 h después del cambio de hora) me ha llamado un buen amigo para decirme que su padre había fallecido. No voy a decir que lo sabía, porque en realidad no era así. Pero odio este tipo de cosas y este tipo de sentimientos antes de que algo malo suceda.
Desde aquí quiero decirle que aunque no le sirva de consuelo, sé por lo que está pasando, que obviamente no se pasa nada bien, pero que al menos mire la parte buena, y es que su padre no ha sufrido más de la cuenta. Que ahora hay un ángel más en el cielo que velará por él y estará siempre a su lado protegiéndole.
Yo no creo en Dios tal y como lo describe la iglesia, pero sí creo en las almas y en el destino. No creo en el cielo ni en el infierno, tal y como lo describe la Biblia, pero sí en la vida más allá de la muerte.
Una buena referencia para los que aprecien la buena lectura son los libros de Brian Weiss ("Muchas vidas, muchos maestros", su primer libro y uno de los más amenos de leer).
Son conceptos muy controvertidos de los que prefiero no hablar mucho por aquí. Todos tenemos nuestra propia opinión, y aunque las que se salgan del catolicismo convencional suelen ser duramente criticadas, todas son o deberían ser igualmente válidas y respetables.
Muchas personas se dedican a juzgar algunas cosas sin conocerlas, por miedo, o por el motivo que sea. No digo que yo alguna vez haya podido hacer lo mismo, pero por regla general me ciño al dicho "No digas nunca, de este agua no beberé", porque cuanto menos quiere uno probarlo, más lo acaba haciendo. Brian Weiss, en sus libros habla, sobre todo, de lo que muchos autores conocidos hablan en sus libros : de la fuerza curativa del amor. Y eso es algo que todos deberíamos saber a estas alturas, sin que nadie necesite decírnoslo. Que con amor se llega más lejos que con odio, y que el rencor sólo sirve para sembrar discordia.
Pero aparte habla de un tema bastante polémico, que son las regresiones curativas a vidas pasadas. No voy a entrar en el tema de decir si realmente existen o no las vidas pasadas, pero sí os puedo asegurar, que aunque lo desconocido siempre sea algo que nos asuste, las regresiones (aunque no sean a vidas pasadas) son altamente curativas.
Por lo tanto, deberíamos dejar de ser tan cerrados a las cosas que no conocemos, y dejar de juzgar situaciones que no hayamos vivido por miedo a lo desconocido, y ser más tolerantes con TODO lo que nos rodea.
Porque nunca es tarde para aprender cosas nuevas, ni para verle un sentido nuevo a algo que ya conocíamos.








No hay comentarios:

Publicar un comentario